Encuentro con Marcos Ana: El día después

Anoche los asistentes al acto disfrutamos, recordamos, nos emocionamos, y compartimos las vivencias de Marcos Ana, que son las de tantos miles de presos políticos. Y aunque la mayoría no podemos ni imaginarnos lo que es estar condenado a muerte, ser torturado, pasar hambre o estar media vida en una cárcel, Marcos Ana nos supo acercar con sus palabras precisas y emocionantes a estas vivencias, y a otras, como la camaradería, la solidaridad, la dignidad o las ganas de vivir con entusiasmo y dedicación, que si bien pueden parecer conceptos más cotidianos, son aún más notorios, y a mi entender, más importantes y decisivos en su historia que las duras penalidades por las que tuvo que pasar.
Siempre es un gran placer poder escuchar los poemas de un poeta recitados por él mismo, pero en este caso además, una experiencia comprensiva que nos acercó aún más a esos versos escritos en secreto, a las palabras de un encarcelado, al sentimiento de esas vivencias: un regalo para nuestros corazones que nos hizo ayer Marcos Ana.
Algunos hemos podido disfrutar recientemente de su libro, y sin duda esta presentación ha sido el mejor colofón posible, y además un incentivo para seguir conociendo más de esta etapa oscurecida de nuestro país, y reconocer la labor humana, democrática y de lucha por la libertad llevada a cabo por tantos hombres y mujeres cuya labor debe ser recordada, enseñada y admirada.

Os animamos a su lectura, es una obra lírica y a veces cotidiana, llena de vivencias emocionantes, pequeñas historias y poemas inolvidables. Una lectura amena e intensa completamente recomendable.